La Colmena, Estado de México
La actitud del hombre a lo largo de su vida es tan cambiante y llena de inseguridad que en todo momento le parece un inconveniente su existencia o lo que se halla a su alrededor , (¿Por qué soy de piel blanca ó porqué soy de piel morena?, ¿Por qué soy gordo ó porqué soy tan delgado?, ¿Por qué está nublado ó porqué hace demasiado calor?).
Estos pensamientos a veces hacen cambiar totalmente de actitud al hombre y la Iglesia de Dios no esta exenta de esto, ¿Pero debido a qué ocurre esto?, ¿Será acaso que aun no hemos comprendido la intención de Dios para con sus hijos?
Israel tuvo el privilegio de ser el pueblo escogido de Dios y contemplo maravillosos prodigios dado todo por la bendita mano del Todopoderoso. Después de su salida de la tierra de Egipto, de ser testigos de lo terrible que puede ser el castigo divino, prueba de ello fueron las diez plagas, ellos rehusaban aceptar un cambio total en su actitud un total reconocimiento al pode de Dios. “Y dijeron a Moisés: ¿No había sepulcros en Egipto, que nos has sacado para que muramos en el desierto?, ¿Por qué lo has hecho así con nosotros, que nos has sacado de Egipto?, ¿No es esto lo que te hablamos en Egipto, diciendo: Déjanos servir a los egipcios?, Qué mejor nos fuera servir a los egipcios, que morir nosotros en el desierto.” Ex. 14:11-12
Es lamentable que exista esta actitud después de haber sido testigos de las grandes proezas de Dios, además de una actitud deplorable un sentimiento de conformismo, he aquí el cuestionamiento hacia nuestra actitud. El pueblo de Israel vio su libertad cuando Faraón mando a ofrecer sacrificio a Dios en el desierto, eso les causo mucha alegría y regocijo, lo cual no duro mucho, porque al ver los carros de Faraón temblaron y su actitud cambio rotundamente.
Hoy día no ha cambiado mucho eso, ya que es mas fácil contagiarnos de una mala actitud que de una buena, no solo los jóvenes tenemos la tendencia a tener estos cambios de actitudes si no la Iglesia en general es participante de ello, aun poseemos esa actitud de culpar a nuestros complejos y frustraciones para debilitarnos espiritualmente y por consiguiente todo lo vemos mal y a todos vemos mal, (que están equivocados).
Sabemos que en la vida no todo es blanco (felicidad) o negro (tristeza), la vida se compone de un sinfín de calores que tal vez nos da miedo ver o descubrir, sentir y experimentar, debiéramos dejar fluir el mundo de colores que tenemos dentro de nosotros porque eso es lo que deseaba Dios que su pueblo hiciera cuando estaban entre el imponente más y el ejercito de faraón “Entonces Jehová dijo a Moisés: ¿Por qué clamas a mi? Di a los hijos de Israel que marchen.” Ex. 14:15
El pueblo tenia que avanzar con o sin el mar abierto, con ó sin ejercito detrás de ellos, el sentido era marchar con todo lo que tuvieran dentro o fuera de ellos, no tenia que existir ningún reclamo del porque acontecían aquellas cosas, debían de confiar en Dios totalmente.
Lo importante de aprender a vivir con las cosas o con las personas que nos rodean es que no afecten nuestros pensamientos ni nuestros sentimientos y pos consiguiente no alteren nuestra actitud, “¿No había sepulcros en Egipto?” debe ser una frase que debemos omitir o debe dejar de existir en nuestras mentes, para tener muy claro y presente que Dios esta con nosotros y que el amor de nuestro Señor Jesucristo nos libertó y que ahora ya pertenecemos a Él.
La actitud del hombre a lo largo de su vida es tan cambiante y llena de inseguridad que en todo momento le parece un inconveniente su existencia o lo que se halla a su alrededor , (¿Por qué soy de piel blanca ó porqué soy de piel morena?, ¿Por qué soy gordo ó porqué soy tan delgado?, ¿Por qué está nublado ó porqué hace demasiado calor?).
Estos pensamientos a veces hacen cambiar totalmente de actitud al hombre y la Iglesia de Dios no esta exenta de esto, ¿Pero debido a qué ocurre esto?, ¿Será acaso que aun no hemos comprendido la intención de Dios para con sus hijos?
Israel tuvo el privilegio de ser el pueblo escogido de Dios y contemplo maravillosos prodigios dado todo por la bendita mano del Todopoderoso. Después de su salida de la tierra de Egipto, de ser testigos de lo terrible que puede ser el castigo divino, prueba de ello fueron las diez plagas, ellos rehusaban aceptar un cambio total en su actitud un total reconocimiento al pode de Dios. “Y dijeron a Moisés: ¿No había sepulcros en Egipto, que nos has sacado para que muramos en el desierto?, ¿Por qué lo has hecho así con nosotros, que nos has sacado de Egipto?, ¿No es esto lo que te hablamos en Egipto, diciendo: Déjanos servir a los egipcios?, Qué mejor nos fuera servir a los egipcios, que morir nosotros en el desierto.” Ex. 14:11-12
Es lamentable que exista esta actitud después de haber sido testigos de las grandes proezas de Dios, además de una actitud deplorable un sentimiento de conformismo, he aquí el cuestionamiento hacia nuestra actitud. El pueblo de Israel vio su libertad cuando Faraón mando a ofrecer sacrificio a Dios en el desierto, eso les causo mucha alegría y regocijo, lo cual no duro mucho, porque al ver los carros de Faraón temblaron y su actitud cambio rotundamente.
Hoy día no ha cambiado mucho eso, ya que es mas fácil contagiarnos de una mala actitud que de una buena, no solo los jóvenes tenemos la tendencia a tener estos cambios de actitudes si no la Iglesia en general es participante de ello, aun poseemos esa actitud de culpar a nuestros complejos y frustraciones para debilitarnos espiritualmente y por consiguiente todo lo vemos mal y a todos vemos mal, (que están equivocados).
Sabemos que en la vida no todo es blanco (felicidad) o negro (tristeza), la vida se compone de un sinfín de calores que tal vez nos da miedo ver o descubrir, sentir y experimentar, debiéramos dejar fluir el mundo de colores que tenemos dentro de nosotros porque eso es lo que deseaba Dios que su pueblo hiciera cuando estaban entre el imponente más y el ejercito de faraón “Entonces Jehová dijo a Moisés: ¿Por qué clamas a mi? Di a los hijos de Israel que marchen.” Ex. 14:15
El pueblo tenia que avanzar con o sin el mar abierto, con ó sin ejercito detrás de ellos, el sentido era marchar con todo lo que tuvieran dentro o fuera de ellos, no tenia que existir ningún reclamo del porque acontecían aquellas cosas, debían de confiar en Dios totalmente.
Lo importante de aprender a vivir con las cosas o con las personas que nos rodean es que no afecten nuestros pensamientos ni nuestros sentimientos y pos consiguiente no alteren nuestra actitud, “¿No había sepulcros en Egipto?” debe ser una frase que debemos omitir o debe dejar de existir en nuestras mentes, para tener muy claro y presente que Dios esta con nosotros y que el amor de nuestro Señor Jesucristo nos libertó y que ahora ya pertenecemos a Él.
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