¿Es difícil ser Joven?

El ser humano por naturaleza está expuesto a pasar por varias etapas en la vida que dentro de ella se van adquiriendo nuevas experiencias que suelen ser buenas o malas para sí mismo o en ocasiones también involucrando a las personas que los rodean. Y en lo fundamental daremos pauta en analizar y reflexionar sobre como es la vida de un joven y que dificultades va afrontando al trayecto de ella. Son tantas las situaciones adversas que el mundo ofrece y que como jóvenes no estamos exentos de todo ello, esto hablando en un ámbito general, es necesario tomar en cuenta que en algunas circunstancias de debilidad el joven momentáneamente decae en gran manera olvidándose de los bienes que en la vida existe y que provienen de nuestro Dios., Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; Isaías 40:30. - (Versión actual) 

¿Qué dificultades encuentra un joven? 

Dentro del pensamiento humano algunos estudios revelan que en el más alto índice de delincuencia, drogadicción, alcoholismo, y prostitución suelen encontrarse entre los adolescentes y en su mayoría jóvenes. Las dificultades que un joven vive día a día son muchas., esto a nuestra forma de pensar y reflexionar como hijos de Dios, aunque quizás para el mundo no son preocupantes porque viéndolo en un aspecto más realista, estos actos mundanales antes mencionados para los que no conocen a Dios es algo normal, pero aun no generalizando, son tantas las vivencias de padres con sus hijos jóvenes que padecen estas problemáticas y que viven en la preocupación y ansiedad de cómo apoyarlos, y las soluciones más factibles para ellos es buscar refugio muchos de estos jóvenes mediante lo buscan en terapias psicológicas o algún otro tratamiento para lograr superarlo. 

Como sabemos el pensamiento del joven es el querer ser, esto significa que opta por tomar sus propias decisiones en hacer y actuar así mismo creyendo que todo lo puede, y en ocasiones esto es aceptable cuando todo se lleva con orden y decencia sin perjudicar a nadie e incluso no dañando en su misma persona, pero a veces actúan sin saber las verdaderas consecuencias que pueden acarrear, son tantas las dificultades y tropiezos que el joven encuentra a lo largo de su vivir y haciendo notorio que una de las grandes dificultades que encuentran es de que el joven o la joven si aun viven en casa de sus padres por algunas diferencias de opiniones o formas de pensar empiezan las discusiones y problemas entre padre e hijo (a) llegando hasta el límite de que el joven se vaya de casa, y a decir verdad cuantos no se han escuchado de estos casos. 

Otra circunstancia que se vive es el momento en que el joven está expuesto a placeres sexuales y nos damos cuenta que para muchos es algo normal el tener estos tipos de actos, pero… ¿Qué hay de las consecuencias al caer en estos tipos de placeres?, existen tantas madres adolescentes y jóvenes solteras en donde los padres no aceptan su situación y desean correrlas de su casa, o en otro caso la joven o adolescente después de tener el acto no desean tener al hijo, optan por la vía más fácil que es el aborto en donde se está faltando al mandamiento de nuestro Dios. 

Algo muy común que vemos en este mundo real es que el joven es muy dominado por la pasión del dinero afanándose y cayendo en vanidad y de ello piensa que con el dinero su mundo es más fácil de vivirlo con tan grandes y muchas diversiones mundanas que para la Iglesia de Dios no son edificantes. Y aun así pudiésemos mencionar más dificultades que un joven del mundo presenta en su vivir pero las más comunes son las antes mencionadas y sabemos que todas estas cosas nuestro Dios aborrece y no son aceptables delante de su presencia. “No pondré delante de mis ojos cosa injusta: Aborrezco la obra de los que se desvían: ninguno de ellos se allegará a mí” Salmos 101:3. 

¿Qué dificultades encuentra un joven de la Iglesia de Dios? 

Por lo que hemos estudiado y conocido mediante la bendita palabra de nuestro Dios y aun reconociendo que profesamos la verdadera doctrina, la vida de un joven de la Iglesia de Dios también muestra muchas dificultades, estando consientes de que las asechanzas del maligno están a la orden del día para que nosotros fácilmente caigamos por todas esa tentaciones que el mundo ofrece. Es menester darle una importancia plena como hijos de Dios que en nosotros mismos depende mucho que tan difícil sea nuestro vivir, dadas las circunstancias que en ocasiones le queremos dar lugar a Satanás y es cuando las cosas se complican. Dios quiere de nosotros plena sinceridad y conciencia pues aún no la hemos logrado, detengámonos y preguntémonos… ¿Cuántas cosas he hecho en contra de la voluntad de Dios? Sabemos que a nuestro Padre Supremo no le podemos ocultar nada y mucho menos engañarlo, alguna vez caemos en tentación de cometer alguna falta desagradable en contra de la voluntad de Dios tales como ir a un baile, o ir con los amigos o compañeros de la escuela a ingerir bebidas embriagantes, o caer en fornicación, o ser de un temperamento muy fuerte respondiendo a golpes, o el tener envidia a mi prójimo o hermano, o quizás el robar, o levantar falso testimonio, o el de levantarle la voz a mis padres, o querer huir de mi casa por sentir que quizás no me comprenden, o que salgan palabras obscenas de mi boca, o peor aún, el dudar del poder de Dios cuando tenemos problemas fuertes en casa, en el trabajo o en la escuela y que asistimos al templo no por convicción sino por algún interés personal y no considerando lo espiritual. 

En ocasiones por tan insignificantes que veamos las cosas decimos… “¡pues es una cosa que no es tan grave!”; y hacemos comparación con faltas que quizás han cometido otros hermanos, pues no le damos importancia a la falta y en ella es resaltada la dificultad en no mostrar nuestra fuerza necesaria para con todos, y haciendo notar algo muy importante para todos los jóvenes y adolescentes que aun estudian y que en ocasiones son forzados a ser partícipes de las tradiciones mundanales es necesario estar consientes de que si es difícil esa situación, y éste mismo caso también lo han vivido hermanos (as) dentro del trabajo, y he aquí la dificultad que presentamos en nuestras actividades diarias. 

Y si en todas estas cosas nosotros como jóvenes de la Iglesia de Dios en algo hemos caído o se muestra el placer de querer hacerlo lo más fundamental es hacer caso a las recomendaciones que ya tenemos y hemos escuchado a lo largo de nuestra carrera espiritual y de que tengamos mucho cuidado y presente de no hacerlo o no volver hacerlo en dado caso que alguna vez lo hicimos., Quita pues el enojo de tu corazón, y aparta el mal de tu carne; porque la mocedad y la juventud son vanidad Eclesiastés 11:10. Tengamos esa convicción plena y confianza en doblar nuestras rodillas y pedirle mucho a Dios para que nuestra vida sea fácil porque sabemos con esa certeza de que nuestro Dios está con nosotros en todo momento., No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentare con la diestra de mi justicia (Isaías 41:10). Y si sobre todas esta cosas perversas aun siendo o no siendo bautizados no hemos caído bendito sea el nombre de nuestro Dios que nos mantenga con esa firmeza de caminar con rectitud, pero sabiendo que el estar firmes en ello también existe la necesidad de doblar nuestras rodillas pidiendo el ser mantenidos como hasta ahora. 

La gran responsabilidad del joven al hacer pacto con Dios. 

Reconocemos del gran requisito que pide nuestro Padre Dios para que dignamente uno después de aceptar y arrepentirse baje a las aguas y pertenezca al magnífico pueblo de Dios. Pero existe algo imprescindible al estar bautizado, a esto lo podemos llamar responsabilidad y conciencia en uno mismo, porque al hacer este pacto, las recomendaciones no se deben tomarlas a la ligera, reconociendo que el bautismo no es para jugar. La astucia de aquel maligno recae también en todos aquellos que han realizado el gran compromiso con Dios y para ello tenemos una gran responsabilidad para mantener nuestro camino con rectitud. Considerando justamente el gran ejemplo de nuestro Señor Jesús cuando soporto aquellas tentaciones hechas por Satanás, en donde Él conscientemente soporto pacientemente porque sabía de la gran encomienda y responsabilidad que tenía por parte de su Padre al ser enviado a la tierra. 

Es de suma importancia tomar en cuenta que el hecho de que seamos pertenecientes al pueblo de Dios y que creamos en el Dios verdadero, misericordioso, amoroso, poderoso, grande y creador de los cielos y de la tierra; pues con esto no quiere decir que no tengamos problemas y dificultades en la vida, sino por lo contrario es cuando aún mas se nos presentan las pruebas que hace que nos podamos desviar del camino de verdad y justicia, en donde Satanás se hace notable y nos ataca por nuestro punto más débil y si no somos fuertes pues fácilmente caemos. Y es por ello que como joven bautizado sabemos de la gran encomienda que se tiene al pertenecer al digno pueblo de Dios y de los cuidados que debemos tener. 

¿Hay para Dios alguna cosa difícil? 

“¡Oh Señor Jehová! he aquí que tú hiciste el cielo y la tierra con tu gran poder, y con tu brazo extendido, ni hay nada que sea difícil para ti.” Jeremías 32:17. 

No hagamos difícil el camino… 

Cuántas veces hemos meditado sobre el camino que debemos seguir y que sabemos de la senda correcta para no tropezar, además se nos es puesto con exactitud las formas de esquivar las tentaciones del enemigo, y si nuestra esperanza está en Dios, que cosa habrá que impida el reconocer la magnificencia del Padre, porque para Dios no hay cosa difícil, ya que lo difícil lo hacemos nosotros con nuestra debilidad espiritual. Sintetizando el propósito fundamental del tema, lo principal es el orillar al joven que en ésta etapa de su vida no le parezca tan difícil vivirla y teniendo siempre en mente no desviarse del camino llevando siempre en el corazón y la mente recomendaciones que nuestro Dios nos hace en su bendita palabra., Apártate del mal, y haz el bien; Busca la paz, y síguela. (Salmos 34:14), y porque aun mas en los postreros días vendrán situaciones más difíciles que el Altísimo ha establecido, pero si confiamos plenamente en Él, no habrá cosa tan difícil. 

Porque este mandamiento que yo te ordeno, hoy no es demasiado difícil para ti, ni está lejos. Deuteronomio 30:11 - (versión actual).

Oscar Morales de Jesús 

Jalpa de los Baños, Estado de México